Sí, ya sé que me he saltado un para de fechas de publicación, pero mi organización últimamente deja bastante que desear, qué mal verdad??
Esta entrada es muy muy especial porque hoy es el cumpleaños de mi hija y me gustaría dedicársela a ella como si le escrisibese una carta.
¡Hola Sofía!
Hoy es tu día, un día para recordar porque cumples 8 años, ¡qué rápido pasa el tiempo! Parece que hace nada que el coche de papá volaba por la carretera porque tú decidiste salir casi un mes antes de la fecha que teníamos de parto, mira si iba el tema rápido que no llegamos ni al paritorio, y ¡qué chiquitina eras!
No sé si te lo he contado, pero después de nacer tu hermano decidí no tener más hijos por motivos que ahora no importan, pero la vida nunca sabes donde te puede llevar y un pequeño tropezón en mi salud me hizo plantearme tener otro hijo para que tu hermano no se quedase solo, pues, por suerte o por desgracia, ni papá ni mamá tenemos hermanos.
Aún recuerdo el día que me dijeron que eras una niña, en plena prueba de amniocentesis, y una alegría inmensa me, mejor dicho, nos invadió, era lo que deseabamos y ese momento fue inolvidable.
Otro momento que no olvidaré es el día de tu bautizo, en un sitio que sabes que adoro, junto a mi Virgen del Pilar, no podíamos elegir mejor sitio para hacerlo. Allí junto a tus padrinos Blanca y Alberto te pusimos de nombre Sofía Pilar, ¿y sabes por qué? Sofía por la que, en ese momento, era la Reina de España, cuando estaba embarazada de ti me leí dos de sus biográfías y me gustaron tanto que decidí que ese iba a ser tu nombre; y Pilar por mi Virgen, claro, a la que quiero mucho.
Tu primer día de cole, tus primeras palabras, la primera vez que te vestimos de baturra, tu primer diente, la primera vez que vino el Ratoncito Pérez, tus primeras Navidades.... momentos inolvidables que hemos vivido juntos y, sobre todo, todos los que están por venir.
Y ya ves, hoy has tenido tu primera fiesta de pijamas con tus amigas en casa, y anda que no os ha costado dormir, porque habláis mucho, mucho. Pero tú estabas feliz y tu cara lo decía todo, creo que no había persona más contenta en el mundo que tú, estar junto a tus amigas era lo que deseabas y lo nerviosa que estabas estos días pensando en ese momento.
Simplemente decirte que te quiero mucho, mucho, porque eres mi pequeña y que no pierdas ni la felicidad que tienes ni esa sonrisa que siempre te acompaña.
Un beso gigante
Mamá
Hasta aquí el post de hoy, espero que os haya gustado y no faltar a mi cita con vosotros el próximo día 3.
Un beso muy grande y gracias por leerme.
Pilar
Comienza el día con una sonrisa
